jueves, 7 de julio de 2011

Tres cosas.


"Hay tres cosas que manifiestan y distinguen la vida del cristiano: la acción, la manera de hablar y el pensamiento. De ellas, ocupa el primer lugar el pensamiento; viene en segundo lugar la manera de hablar, que descubre y expresa con palabras el interior de nuestro pensamiento; en este orden de cosas, al pensamiento y a la manera de hablar sigue la acción, con la cual se pone por obra lo que antes se ha pensado. Siempre, pues, que nos sintamos impulsados a obrar, a pensar o a hablar, debemos procurar que todas nuestras palabras, obras y pensamientos tiendan a conformarse con la norma divina del conocimiento de Cristo, de manera que no pensemos, digamos ni hagamos cosa alguna que se aparte de esta regla suprema.

Todo aquel que tiene el honor de llevar el nombre de Cristo debe necesariamente examinar con diligencia sus pensamientos, palabras y obras, y ver si tienden hacia Cristo o se apartan de él. Este discernimiento puede hacerse de muchas maneras. Por ejemplo, toda obra, pensamiento o palabra que vayan mezclados con alguna perturbación no están, de ningún modo, de acuerdo con Cristo, sino que llevan la impronta del adversario, el cual se esfuerza en mezclar con las perlas el cieno de la perturbación, con el fin de afear y destruir el brillo de la piedra preciosa.

Por el contrario, todo aquello que está limpio y libre de toda turbia afección tiene por objeto al autor y príncipe de la tranquilidad, que es Cristo; él es la fuente pura e incorrupta, de manera que el que bebe y recibe de él sus impulsos y afectos internos ofrece una semejanza con su principio y origen, como la que tiene el agua nítida del ánfora con la fuente de la que procede.

En efecto, es la misma y única nitidez la que hay en Cristo y en nuestras almas. Pero con la diferencia de que Cristo es la fuente de donde nace esta nitidez, y nosotros la tenemos derivada de esta fuente. Es Cristo quien nos comunica el adorable conocimiento de sí mismo, para que el hombre, tanto en lo interno como en lo externo, se ajuste y adapte, por la moderación y rectitud de su vida, a este conocimiento que proviene del Señor, dejándose guiar y mover por él. En esto consiste (a mi parecer) la perfección de la vida cristiana: en que, hechos partícipes del nombre de Cristo por nuestro apelativo de cristianos, pongamos de manifiesto, con nuestros sentimientos, con la oración y con nuestro género de vida, la virtualidad de este nombre".

Del Tratado de san Gregorio de Nisa, obispo, Sobre el perfecto modelo del cristiano.

Fuente: Oficio de lectura martes XII del tiempo ordinario.

10 comentarios:

  1. Si no somos capaces ni de intentar imitar a Cristo. Eso es señal de que nos hace mucha falta la oración.
    Un beso María.

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  2. Muchas gracias María del Rayo, por traernos hasta aquí a San Gregorio de Nisa. besos.

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  3. Me ha encantado leer esto, gracias. Yo -aunque no lo parezca- tengo presente a Dios en cada acto y cada pensamiento de mi vida.

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  4. GRACIAS, sabe es verdad estas son los pequeños detalles que distinge la vida del Cristiano pero tambien la de una cosagrada que el señor nos de la gracia vivir coherentemente con el estilo de vida que hemos sido llamado siendo un Cristo en medio del mundo y dando sabor a ÉL muy unidas en oración amiga y un abrazo

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  5. ¡Gracias María, me ha encantado este
    tratado de San Gregorio!
    Pido al Señor, que seamos luz, ánimo,
    y consuelo para todos los que entran
    en contacto con nosotros.
    Un abrazo.
    Dios te bendiga.

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  6. Preciosa reflexión, tenía tiempo sin reflexionar sobre aquello que es de Dios y aquello que es del malo. Gracias María por ese post. Que Dios te bendiga siempre

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  7. Maravilloso.

    San Gregorio de Nisa fue un gran teólogo. Muchas gracias por traernos este genial texto para reflexionar.

    Saludos.

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  8. Ser de Cristo con el alma y con el cuerpo... ser suyos totalmente y así manifestarlo.
    Muchas gracias María, es un gran texto para meditar.
    Un abrazo.

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  9. Gracias, siempre gracias....
    ABRAZOS ENORMES.

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  10. Yo tengo un pequeño anillo que siempre traigo, que dice abreviado, WWJD (que haria Jesus?) y el tenerlo en mi dedo siento que me guia. Un abrazo Martha.

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Gracias por sus comentarios, para mi son muy importantes.

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